Buenos días, amada gente. Hoy tengo ganas de hacer hincapié en un hecho que, aunque ha pasado desapercibido desde el punto de vista de la consciencia colectiva, ha sometido a los seres humanos a lo largo de los tiempos, consiguiendo llevar a la masa al redil de la mente condicionada, aunque en tiempos recientes, a merced de la severidad de la extorsión, ha provocado una reacción contraria a la deseada y que tiene que ver con el despertar de la consciencia.
Aunque el ser humano tiene un enorme poder potencial, lo cierto es que, a lo largo de la historia, este poder nos ha sido usurpado por las élites que gobiernan el mundo. Estas élites satánicas que han parasitado el mundo y los sistemas humanos, en sus ámbitos externo e interno, lo han hecho mediante usurpación, control, extorsión y técnicas de manipulación mediática. Volvemos a recalcar que no es algo nuevo, es algo que se ha hecho desde los orígenes del mundo, pero sí es cierto que en los últimos dos siglos y en especial en los últimos años, estas técnicas de manipulación se han sofisticado sobremanera, a merced de la globalidad sustentada por el desarrollo e implantación de la inteligencia artificial y de las nuevas tecnologías. Para conseguir el dominio de las masas los poderes fácticos se han basado en algunas premisas que iremos mencionando a grandes rasgos. Cabe decir que las entidades que están detrás de las cabezas visibles de las élites que se han apoderado del planeta en todos los sentidos, son magos negros, hábiles expertos en predistigitación, simulación y sugestión.
La primera de las premisas mencionadas consiste en el conocimiento que tienen de la psique humana, en especial de la mente inferior (el reino que mejor dominan) de su vulnerabilidad, previsibilidad y tendencias adictivas. Conocedores de la inmadurez de consciencia de las masas y de su maleabilidad, han estudiado nuestros hábitos, costumbres, preferencias, rechazos, miedos, etc. para saber en detalle qué nos gusta hacer, qué nos mueve, qué nos disgusta, que nos encoleriza, qué tememos más, dónde nos gusta ir, incluso qué nos gusta comer, etc. De esta forma, y teniendo en cuenta nuestras preferencias, así como nuestras debilidades y miedos profundos, no sólo se crean necesidades ficticias y se promueve el consumo compulsivo y la competitividad, sino que también se promueven ideologías y tendencias de diseño, para dirigir a las masas hacia determinadas posiciones a las que a ellos les interesa llevarnos. Así se generan reivindicaciones controladas y dirigidas por falsos líderes, grandes movimientos sociales de masas, así como falsos ataques, falsos eventos, falsas catástrofes, falsas pandemias, etc. con las que consiguen crear grandes psicosis colectivas.
Otro factor fundamental sin el cual este control globalizado no se podría dar, consiste en que estas élites han comprado y se han apoderado de todos los medios masivos de comunicación, falazmente llamados “medios de información”. El más poderoso de ellos, por su gran poder de sugestión, es la televisión, infiltrada en todos los hogares del mundo. Sus canales, la prensa, las radios, están completamente al servicio de los relatos de ficción que se presentan a las masas como el relato real, unánime e indiscutible. Pero los relatos y discursos maquiavélicos que han parasitado y programado las mentes humanas, no sólo llegan a nosotr@s a través de la prensa o los informativos de la televisión o la radio, llegan a través de series, películas, los juegos virtuales tan extendidos hoy en día, las letras de las canciones de moda, etc.
En esta misma línea tenemos el hecho de que las élites se han apoderado del mercado en su globalidad, hasta el punto de que son dueños de las industrias y en particular de las más fundamentales, desde el punto de vista de la supervivencia humana: la industria farmacéutica y la industria alimentaria. De esta forma, muy lejos de velar por la salud y la buena nutrición de la población humana, han hecho todo lo contrario: intoxicarnos y enfermarnos. En un momento dado, dinastías más poderosas del mundo tuvieron muy claro que el control del mundo pasaba por el control de las finanzas. La creación de la banca privada y particularmente la creación de la Reserva Federal en 1913, que les permitió fabricar y controlar el dinero, catapultó la ambición humana a límites insospechados de codicia y maldad.
Otra premisa básica o factor fundamental que ha permitido que el control y el sistema corrupto se infiltre prácticamente en todos los gobiernos y administraciones, hasta las más pequeñas, consiste no sólo en comprar a sus miembros, sino también en permitir los movimientos fraudulentos de dinero, robos masivos, grandes evasiones de capital, inversiones maquiavélicas, etc. De esta forma, las cabezas visibles de los sistemas, movidos por la avaricia y la avidez de poder y dominio, se han prostituido, han vendido sus mentes y sus almas, se han convertido en títeres del poder oscuro y han caído en las prácticas más terribles e inimaginables de corrupción y maldad. El terrorismo, el crimen organizado, las guerras, la industria armamentística, el macronegocio de la droga, la perversión sexual más atroz, la pedofilia, el tráfico de niñ@s, la trata de personas, rituales satánicos, canibalismo y un sinfín de maldades, son prácticas todas ellas mucho más extendidas de lo que se pudiera sospechar.
Otro factor fundamental ha sido el adoctrinamiento al que nos han sometido desde niñ@s y a lo largo de nuestra etapa formativa, profesional y/o universitaria a través de los programas educativos estandarizados en el mundo entero, con los que han reproducido relatos ficticios sobre los sucesos y los hechos, omitiendo la realidad que les interesaba ocultar e inventando la historia que les interesaba explicar. Han condicionado y uniformado nuestra visión y nuestra percepción, han programado nuestras mentes y mermado nuestras capacidades creativas al reducir la diversidad y la iniciativa personal haciendo pasar las habilidades individuales por el rasero de lo que al sistema le interesa y considera, hipócritamente, correcto y aceptable.
Mucho podríamos extendernos en cada uno de los temas mencionados, pero no es ese el objetivo. El objetivo es, por un lado, denunciar un hecho muy real para contribuir a iluminar la gran sombra de la psique humana, y por el otro, anunciar que este sistema satánico, que ha dominado el mundo durante eones, tiene los días contados. El poder destructivo del mal acaba por arremeter contra sí mismo. El refrán popular que reza: “La avaricia rompe el saco”, aplica completamente en este caso. Tal es el grado de mentira, descaro, extorsión y abuso al que estos seres perversos han llegado, tal es el grado de apretón vital y energético al que nos han sometido y nos están sometiendo, que la parte más despierta de la humanidad ha llegado al límite de lo que está dispuesta a tolerar. Pero el festival acaba de empezar, con la caída masiva de la economía, más y más personas llegarán al límite de su capacidad de aguante. Hay otro refrán que también aplica aquí: El hambre agudiza el ingenio. Nos encontramos en la necesidad vital de despertar, recuperar nuestro poder y tomar acción. Por eso la humanidad se está movilizando en todas las partes del mundo. Hay mucho, mucho trabajo por hacer y se requiere de la implicación consciente de tantas personas como sea posible, pero no me cabe duda de que lo conseguiremos, pues la preeminencia de la bondad y la de luz es incuestionable. El Poder del Espíritu de Bondad, en su quehacer silencioso, sirve al Propósito Superior de la Providencia. Estamos afianzando los irrompibles y poderosos lazos del Corazón, y cuando esto sucede, nuestro poder se multiplica y crece en proporción geométrica, contribuyendo a que la Llama del Despertar de la consciencia crezca y con su Luz en aumento revivifique más y más vidas, más y más mentes, más y más bondades, más y más propósitos de luz en un movimiento imparable.